sábado, 3 de julio de 2021

RETOMANDO EL FUTURO

RETOMANDO EL FUTURO

Gracias a la vacunación empezamos a dejar atrás un año que para muchos, como para mí, ha sido, tal vez el más difícil y desconcertante. Un largo tiempo de obligado aislamiento por la pandemia.

Con todo, balcón a balcón, fuimos capaces de llenar nuestras calles vacías con música, con dibujos de nuestros niños y niñas o con aplausos agradecidos a los sanitarios y servidores públicos. En estos 15 meses, hemos tenido que acostumbrarnos a sonreírnos con los ojos y saludarnos a distancia.

Desgraciadamente, hemos tenido que despedir a 40 vecinos y vecinas, víctimas de la pandemia y cerca de 2.000 alborayenses le han hecho frente al virus. Pero al hacer balance, cuando empezamos a superar el desastre, comprobamos con orgullo que Alboraya, una vez más, ha demostrado ser un pueblo solidario, valiente y responsable.

Alboraya, una vez más, ha demostrado ser un pueblo solidario, valiente y responsable.

Lejos de darnos por vencidos, todos y todas nos preparamos ya para acometer la recuperación de nuestro pueblo y la transformación social imprescindible para que el futuro sea posible.

Comprometidos como estamos con el Pacto de Alcaldes o con los objetivos ODS de Desarrollo Sostenible, ahora más que nunca, es el momento de dar un gran impulso a la modernización y mejora de Alboraya, con la ayuda tanto de Europa como del Estado y de todas nuestras instituciones.

Es el momento de aprovechar la oportunidad para implantar más rápidamente energías renovables en los edificios públicos y privados, en el transporte o en nuestras industrias. Podemos trabajar juntos por el desarrollo de la huerta, ampliando el Plan actual para apostar por una mayor digitalización, también en el sector agrario. Esto nos permitirá hacer una transición ecológica más rápida y segura y conseguir un sector más productivo, limpio y competitivo.

Hoy podemos mejorar nuestros barrios, contando con ayudas públicas, si invertimos en la restauración y la mejora energética de las viviendas ineficientes, a la vez que planificamos los barrios para que cuenten con los equipamientos escolares, sanitarios o de vivienda protegida, de los que carecemos aún, como prevé el Plan General que hemos propuesto.

 Además, tenemos la oportunidad de conectar nuestros tres núcleos y la huerta con un espacio natural y agrícola, como propone el Plan del Parque Agrario de Peixets. Un gran parque que promueva el ocio saludable, la protección y la innovación medioambiental, además de la enseñanza y la investigación en el sector agroalimentario de Alboraya.

Tenemos todos los ingredientes necesarios para asegurarnos un futuro esperanzador.

Juntos podemos aprender también a movernos de una forma más sostenible y saludable, adecuando Alboraya a esa nueva necesidad, como prevé el Plan de Movilidad Sostenible que estamos a punto de aprobar. Y eso es posible sólo si además de obtener los equipamientos para cada barrio, se mantiene vivo el comercio de proximidad. Es por eso que hemos destinado en este tiempo de crisis hasta un millón de euros en Alboraya, entre el Ayuntamiento, la Generalitat y la Diputación, para ayudar a sobrevivir a nuestra hostelería y al sector de autónomos y pequeños comercios.

Sin olvidar que las oportunidades de innovación y emprendimiento se desarrollan especialmente en nuestro polígono industrial. Por este motivo, invertimos cada año en su modernización: desde el acceso a la fibra, hasta la iluminación LED más ecológica o, este año, mejoras en seguridad con cámaras de video vigilancia, o renovación de los hidrantes contra incendios, etc.

El futuro se amplía aún más para Alboraya si somos capaces de atraer un turismo sostenible y de calidad. De ahí que mantengamos y ampliemos los sellos de calidad en nuestras playas y estemos redactando y elaborando el Plan de Municipio Turístico Inteligente, con una amplia participación de todos los agentes sociales, para poner en valor nuestro paisaje de playas y huerta, nuestros productos y nuestra cultura.

Alboraya tiene todos los ingredientes necesarios para asegurarnos un futuro esperanzador. Los planes, el análisis, los estudios previos que nos demanda Europa y la Generalitat están listos o en marcha. Juntos podemos conseguir dar un gran paso hacia la modernización y la sostenibilidad de nuestro magnífico pueblo. Contamos con la voluntad y la fuerza que nos da, a todos y todas las alborayenses, recuperar la confianza en el futuro.

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sábado, 10 de abril de 2021

Un año inimaginable

Éste ha sido un año ciertamente inimaginable para todo el mundo, en el sentido amplio de la palabra "mundo". Todas y todos nos hemos preguntado muchas veces durante este año si estábamos preparados para algo así. Hemos tenido que enfrentarnos a lo desconocido, a lo impensable. Las incertidumbres y los inevitables errores del día a día han pesado mucho. A veces de manera insoportable. Un año después vemos cerca el final y muchos entendemos que nos enfrentamos a un cambio de época.

En este tiempo incierto, en Alboraia hemos continuado con la redacción de planes y proyectos que han de poner las bases para afrontar los retos del presente y futuro colectivo. Como país, como comunidad y como pueblo, hemos asumido con más claridad que nunca, que 2030 es la fecha clave.

Desde el Plan General Urbano, pasando por los planes de movilidad sostenible, de accesibilidad, de igualdad, de conservación y desarrollo de la huerta... todos ellos planes locales en coordinación con los planes territoriales autonómicos, que se complementan con planes de energías renovables, de residuos, del comercio e industria, de turismo sostenible... Todo está adaptándose a los nuevos paradigmas y objetivos. Se trata de planificar hoy con la mirada puesta en el futuro, sin dejar de lado la resolución de los problemas presentes y heredados del pasado.

Afrontamos ya el final de un largo proceso de redacción de nuestro Plan General de Ordenación Urbana que pone los límites y las bases que han de regular nuestro territorio, su desarrollo y sus necesidades, presentes y futuras, de dotaciones públicas, vivienda, protección y desarrollo de la huerta, mejora del sector industrial, turístico y de servicios...

Tendrá una decisiva influencia sobre la educación y la salud en lo que compete a Alboraia, nuestro patrimonio cultural, nuestro paisaje y nuestras playas. En coordinación con otras administraciones, con éste Plan General y otros planes y estudios, se intenta planificar mejor el futuro, pero también nuestro presente.

Debemos favorecer las condiciones para llegar a tiempo a cumplir los compromisos adquiridos en la agenda 2030 y dar repuesta a nuestras necesidades actuales. Estoy convencido de que lo podemos hacer escuchando, llevando a cabo y desarrollando, entre todos y todas, estos proyectos y planes, sin obviar la realidad actual de Alboraia y con los ojos puestos en los objetivos marcados para el año 30 y siguientes.

Pero hay voces que defienden que no se tomen decisiones ahora, que las cosas queden como están a la espera de “tiempos mejores” (y seguramente otros actores), para decidir. Pero las oportunidades se dan en éste momento. Y si los planes y proyectos que presentamos vienen avalados por las otras administraciones competentes, porque sus respuestas son adecuadas a los problemas y objetivos planteados, y si Europa nos brinda además ahora un impulso extraordinario para avanzar, no es razonable echar años de trabajo por la borda y dejar pasar las oportunidades de mejora que hoy se nos ofrecen.

Tras un año inimaginable, llegan oportunidades que habrían resultado impensables en otras crisis. Es el momento de apostar juntos por un futuro verdaderamente esperanzador.


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sábado, 20 de febrero de 2021

Copio con permiso de la autora esta reflexión:


👉Hablando de periodismo...
Hacía tiempo que no me paraba a escribir, pero esta vez lo creo más que necesario.
Quería exponer que os echo de menos amigos y amigas periodistas, pues sí, echo de menos las llamadas para contrastar, las llamadas para pedir información o incluso las citas esporádicas, ¿por qué digo esto? Porque hace muchísimo tiempo que dejasteis de llamar a los gabinetes de comunicación de instituciones para contrastar, no digo "para saber vuestra versión", digo CONTRASTAR, y lo pongo en grande.
Desde hace muchos años los gabinetes de comunicación de los ayuntamientos nos hemos convertido en pseudoproductoras de material para los medios de comunicación, ya sea gestionando entrevistas con personas que no tienen nada que ver con el Consistorio, material audiovisual o incluso cortes de voz... ¡vaya! para lo demás... hacer periodismo, no estamos bien vistos.
Unos dicen que si estamos vendidos, otros que tenemos unos intereses concretos... ¿y yo qué digo? Que todos, desde el que marca el número de teléfono, hasta el que te da unas declaraciones tiene unos intereses, pero tal vez sean los más sinceros que te puedas encontrar.
Pongo un ejemplo: ¿Qué diferencia hay entre las declaraciones de una asociación y de un/a alcalde/sa?... que el segundo está democráticamente elegido por la ciudadanía y no se esconde... claro, da la casualidad que este/a edil forma parte de un partido político... ¡Cachis, ya la hemos liado! Tenemos un dramón, se dedica a la política.
No sé, a lo mejor es una locura que esa persona intente trabajar por su municipio.
Miremos el otro lado, una asociación, pero no las que conocemos de toda la vida, no. Ya os digo yo que esas participan de corazón en todas las iniciativas que proponen y se le disponen.
Hablo de las de reciente creación... de las que se montan con una única finalidad y con la intención de querer hacer daño, pero ¡Oh, amigo periodista! No te voy a contar yo quién está detrás de todo.
Aunque eso da igual, lo fácil es llamar y preguntar la "versión", sin pedir "documentación" ni pedir nada, da igual que lo ofrezcas, da igual que lo mandes, ni abrirán el mail... ¡LOS TIEMPOS!... ¡EL CIERRE!... ¡EL MORBO!
Creedme, os entiendo, pero no comparto la forma de trabajar. ¿Por qué cualquier persona puede contar cualquier cosa y le hacéis hueco y los gabinetes tenemos que pedir e incluso poner pasta? ¡Es más! ¿Por qué utilizáis a periodistas de vuestra plantilla para que hagan de comerciales y muchas veces nos obliguéis a los gabinetes a comprar espacios? No me escondo, digo "obliguéis" porque se hace...
La verdad, es que utilizo este espacio para desahogarme. No soy la única que piensa todo esto, no soy la única que está cansada de callarse...
En algún momento debe haber un punto de inflexión y plantearnos ¿qué tipo de periodismo queremos hacer? y por supuesto ¿qué tipo de medios de comunicación queremos?... entre otras muchas cosas...
Vuelvo a decir lo mismo que al principio, se os echa de menos... espero que estéis todos y todas bien.

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